
voy a mirar este nuevo año como si fuese la primera vez que tengo la suerte de vivir 365 días enteros para mi solita...
te miraré a los ojos con sorpresa y asombro, alegre por descubrir que sigues a mi lado compartiendo una cosa llamada amor...
En cada uno de estos 365 días miraré todo y a todos como si fuese la primera vez, sobre todo las cosas pequeñas, a las que ya estoy tan habituada que he olvidado la magia que las envuelve...
Las teclas de mi mac, por ejemplo, que curiosas son... se mueven con una energía que se me escapa... y la página que aparece en la pantalla, y que hace mucho que ya no existe como una hoja de mi bloc de notas, aunque yo me imagine haciendo mis garabatos en los margenes, como siempre...
y al lado, en mi mesa y mis cajones, se acumulan algunos papeles que no tengo paciencia de poner en orden, pero estoy convencida de que si me pusiera, descubriría que esconden novedades, todas estas cartas, impresos, recortes, recibos, ganarían vida propia, y tendrían historias curiosas que contarme, sobre el pasado y el futuro... tantas cosas en el mundo, tantos caminos recorridos, tantas entradas y salidas en mi vida.
me pondré mi camiseta blanca de siempre... y mis cómodos vaqueros gastados... y por primera vez voy a fijarme en su etiqueta, sus bordados... y me imaginaré las manos que la diseñaron, en qué pensaría esa cabecita, en qué tendría entretenido su corazón...
que todo lo que toque con la punta de mis dedos, vean mis ojos, pruebe mi boca, sea ahora diferente, aunque haya sido igual durante muchos años...
y que dejen de ser naturaleza muerta, y pasen a sorprenderme con emociones que la rutina ya había desgastado.
Quiero mirar por primera vez al sol, las nubes, la lluvia y el viento... y olvidaré todas las cosas que aprendí sobre las estrellas y fenómenos metereorológicos, y estas serán de nuevo para mí lo que son para mi bebe, lagrimas de los angeles, o naves que transportan a los espíritus que velan por nosotros, o en cualquier cosa que me apetezca creer en el momento...
quiero verme a mí misma, cada uno de estos de este nuevo año, como si fuese la primera vez que estuviese en contacto con mi cuerpo y mi alma... quiero verme con las cosas habituales del día a día pero por primera vez, sorprendida en los detalles, a esta persona que camina, que siente, que habla como cualquier otra, quiero fijarme en mis gestos más simples, como conversar con mis amigas, abrir mi correo, poner la ropa en el cesto de la ropa sucia, encender una vela, contemplar a mi hijo durmiendo en su cuna, preguntándome con qué estará soñando.