10 abril, 2013

Internet.... y yo

Me fascina. No sólo porque me mantiene mientras trabajo para él, sino porque en el fondo, no sabría vivir sin él, no sabría qué hacer sin él, y no podría respirar sin él... sin duda, nuestra relación cada día es mucho más sólida y profunda, más entregada.

La primera vez que coincidí con él, fue en un curso de formación, y qué quereis que os diga? fue un auténtico flechazo, caí rendida a sus pies, a todos sus encantos... y supe que nuestra relación sería de entrega total y absoluta. Hoy, casi 15 años después, sigo totalmente enamorada. Su inmensidad, su capacidad de sorprenderme cada día, su poder, su universalidad... a veces hasta me resulta intimidante.

Y lo que más me gusta de él es que en cualquier momento de día, a cualquier hora, cualquier pensamiento que me surja sobre cualquier tema... sólo tengo que alargar mis dedos un poquito, y él está ahí. Siempre está ahí, para mi. Un amante sometido a mis deseos, a un sólo clic. Me hace sentir tan poderosa saber que él es... tan mío! A veces creo que podría alimentarme de... él  hasta empacharme.

Sólo que a veces me planteo cómo manejo yo este amor incondicional. Me refiero a que, sería yo capaz de estar un día sin él? Definitivamente no. Quizá unas pocas horas? No, creo que tampoco. Él es ya un pedacito de mi, forma parte de mi día a día, de mis rutinas, y si tuviera que pasar unos días totalmente desconectada, forzosamente desconectada de él, moriría de amor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario