pensamientos en el tren...

como me dice alguien que me quiere mucho, uno encuentra en su vida una sola vez a su amor verdadero... dá vértigo pensarlo, pero es así... y en el fondo, estés con quien estés en este preciso momento, lo sabes... sólo hay una persona en el mundo, en el mismo mundo en el que tu vives, que encaja perfectamente en las piezas de tu puzzle... y suele coincidir con que esa persona que encaja perfectamente en el puzzle de tu corazón, no encaja en el puzzle de tu vida, así que aunque tu corazón péne por estar con ella, sabes que antes o después, es imposible...

él me decía que también existía la otra opción: la del conformismo. has encontrado a alguien que más o menos encaja en el puzzle de tu vida, y aunque no es la media naranja de tu corazón, no te desagrada demasiado mirarle la cara todos los días...te reconforta su compañía en las tardes tontas de domingo y cuando piensas que llegarás a viejo no sintiendote tan sólo en el mundo... a quien quieres engañar?

pero cual es el precio? cúal es el coste de este sacrificio? tu amor verdadero por la comodidad de unas viejas zapatillas? aquel amor de verdad, el que duele en el alma como duelen las heridas que se curan con vinagre, aquel que te lastima, que sus alegrias son desmesuradas y sus penas inconsolables...

puedes huir de ese amor, ser un cobarde y refugiarte en el conformismo de otros brazos más blanditos... pero cuando pasen los años y mires atrás, y mirés a quien tienes a tu lado, ójala puedas ver al amor que encajó perfectamente en el puzzle de tu alma, por que todos los demás logros que hayas tenido en esta vida serán secundarios, y te llenarán más o menos en función de lo calentito que esté tu corazoncito

no es la paz, no es el sosiego ni la estabilidad... el amor de verdad es furia, pasión, entrega e inquietud, aventura y desenfreno... sale de las entrañas y mueve montañas...

yo he tenido suerte en esta vida... y como otros que habéis hablado conmigo y me lo habéis dicho, también habeis visto pasar por delante de vuestros ojos a esa persona... pero también me equivoqué mil veces, y quise ver un puzzle encajado, piezas sueltas pegadas con celo... sólo había cariño... me sonrio cuando escribo esto porque aunque luego hablando con más gente, negais la mayor, luego, a solas, confesais haberle visto pasar, pero que su momento y el vuestro no era el mismo, y se dejó pasar... y lo dejas pasar hasta cuando? para otra vida? para siempre?

que no nos falte la iluminación de la fe en que un día "volverá con el rabo entre los cuernos implorando una vez más", pero a diferencia de lo que canta ella, si valoramos más el amor que el orgullo, lo reconoceremos... y no nos preocupará la luz... simplemente viviremos el día a día con tanta intensidad que no habrá nadie a quien le pase desapercibido que ESTOY AMANDO con sólo mirarnos... ese día llegará, es sólo cuestión de dos, no hay más almas en esa negociación